La gran ventaja de hacer nuestros propios refrescos es que controlamos los ingredientes que añadimos a los mismos y en muchas de ellas, evitamos los aditivos poco saludables.
Los jugos de frutas que los componen nos aportan vitaminas y minerales, así como vitamina C y potasio. Cuanto menos sea su proporción de azúcar, más saludables serán.
Los granizados son los más saludables al contener un mayor contenido de hielo, y por lo tanto, de agua en proporción para con el resto de los ingredientes. Obviamente, todo dependerá de qué hagamos la bebida que dará sabor al granizado.
Entre los beneficios de esta clase de elaboraciones:
– Nos mantienen frescos e hidratados en los días de más calor.
– Al estar principalmente compuestos por agua, son bajos en calorías y grasas.
– Destacan por su poder digestivo.
Prepara hielos en cubeteras con frutas dentro o sustituyendo el agua por jugo natural. Así cuando los cubitos se derritan en tu bebida evitará que quede aguado y le dará un toque original con las frutas que se liberen de su interior.
Limonada casera
En esta receta se aprovecha hasta la piel de esta fruta. Ayudará a mantenernos hidratados y aporta vitamina C. Reducí al máximo su cantidad de azúcar, lo suficiente para compensar la acidez del cítrico.
Granizado de limón
Se prepara el refresco de limón para congelarlo y romperlo y conseguir así la textura tan característica de esta bebida. Podés hacer de todos los sabore, sustituyendo el jugo de limón por el de otra futa. También podés hacer granizados de sabores tan originales como el granizado de café.
Batido de melón
Los batidos o smoothies también son ideales para dar salida a la fruta madura, crear combinaciones de todo tipo totalmente a tu gusto o, como en la receta de batido de melón, disfrutar de la fruta de temporada de una manera diferente. Le podés añadir leche y yogur para darle un resultado más cremoso.
Bebida de coco
Las bebidas vegetales también resultan deliciosas y dependiendo con qué ingredientes las elabores, pueden ser las más veraniegas. Frescas, ligeras y saludables, son perfectas para mantenerte hidratado cuando querés darle algo de sabor al agua.
Kombucha a base de té negro
La kombucha es una bebida probiótica de sabor ácido y refrescante que se hace a base de té negro fermentado y azúcar. También podés verlo elaborado con otros ingredientes naturales extra como jengibre, té verde o jugos de diferentes frutas para darle un sabor más agradable, similar al de un refresco.
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